El tiempo en la música posterior a 1972 de György Ligeti - III

CARAVANA GUERRA, Olivier. Cronos y Caos. El tiempo en la música posterior a 1972 de György Ligeti. Madrid, Universidad Autónoma de Madrid, 2011.


La orientación política de Sándor Ligeti hacia el socialismo y su ateísmo no impidieron que György ingresara, a la edad de trece años, en el movimiento juvenil judío Habonim aunque lo abandonaría tres años después debido a discrepancias respecto a los ideales colectivistas del movimiento. Poco a poco, se hará más palpable el distanciamiento emocional e intelectual con su padre, sobre todo en cuanto al ideal político se refiere.
En 1936, su hermano pequeño Gábor comienza sus estudios de violín. Inmediatamente Gyuri protestó reclamando su derecho a estudiar un instrumento musical y fue en 1937, a la edad de catorce años, cuando empezó sus clases de piano. Aunque dedicaba un esfuerzo y tiempo considerable al estudio de este instrumento, él era consciente de que ya era tarde para alcanzar una técnica avanzada de piano. Debido a que no disponía de un piano en la casa familiar, al salir de sus clases en el colegio tenía que desplazarse al domicilio de su profesor a estudiar. Rápidamente sintió curiosidad por la composición, sustanciándose ésta en un vals en el estilo de Grieg.
Motivado por la necesidad de contar con un espacio más adaptado al ejercicio de la medicina por parte de su madre, toda la familia se traslada a una casa más céntrica en Cluj. Sándor Ligeti decide alquilar el piano de un amigo de la familia y aunque el instrumento se encuentra en unas condiciones pésimas de mantenimiento, el joven Gyuri ya no tiene que desplazarse cada día para practicar.
En la escuela aprende, además de rumano, el alemán y el francés. Posee una especial facilidad para las lenguas. Durante su vida estudió y habló, con más o menos fluidez, siete idiomas[1].
En 1940, en los inicios de la Segunda Guerra Mundial, el territorio de Transilvania septentrional fue cedido a Hungría en el Segundo Premio de Viena, los de Besarabia y el norte de Bucovina a la Unión Soviética y la parte meridional de Dobruja a Bulgaria. Todo esto siguiendo las líneas que la Alemania Nazi había establecido en el Pacto Molotov-Ribbentrop. De esta manera Cluj pasaría a manos húngaras y a denominarse Kolozsvár. De nuevo, los cambios afectaban a lo administrativo pero también a lo doméstico. En 1941, Hungría entró en la guerra como aliada de Alemania. Sin embargo, Kolozsvár continuó con su cotidianeidad y permitió a Ligeti componer de manera ininterrumpida.
A la edad de dieciséis años, compra un cuaderno de notas para hacer sus bosquejos musicales. Será el primero de los dieciséis que utilizará entre 1939 y 1952, los cuales se encuentran en la Fundación Paul Sacher de Basilea.
Entre 1938 y 1939, Ligeti compone un grupo de seis Pequeñas piezas para piano (Kis zongorádarabok) de una evidente mayor originalidad e individualidad estética. Encontramos también cierta sensibilidad romántica en el tratamiento que del Wanderers Nachtlied de Goethe hace en un bosquejo orquestal incluido en dos de los cuadernos de notas, el primero de ellos datado en el 29 de diciembre de 1941.


[1] Húngaro, rumano, alemán y francés durante su infancia y juventud, sueco durante la década de los sesenta, inglés en los setenta y posteriormente italiano. Aunque Ligeti manifiesta dominar siete idiomas, lo cual es corroborado por el compositor Conlon Nancarrow en una carta a su amigo Peter Garland en 1982, tenemos que considerar que también conocía el hebreo, ya que realizó él mismo la traducción al húngaro del texto de su primera canción titulada Kineret.